Aunque a veces discutimos como hermanas, en el fondo siempre ha habido amor incondicional. Ese lazo único que nos une es lo más valioso que tengo. ¡Feliz cumpleaños, hermana querida!
¡Felicidades, hermana! Que este cumpleaños te recuerde lo valiosa y especial que eres, no solo para mÃ, sino para todos los que tenemos la suerte de tenerte en nuestras vidas.
La vida me dio la fortuna de crecer a tu lado y aprender de tu sabidurÃa. En tu cumpleaños, solo puedo desearte amor infinito, salud y muchos momentos felices.