Hermano, feliz cumpleaños hasta el cielo. Cierro los ojos y puedo imaginarte sonriendo, libre, en paz, rodeado de luz. Aquà en la tierra sigo llevando tu memoria como mi mayor tesoro.
En tu cumpleaños, hermano, cierro los ojos y te imagino aquÃ, riendo, como antes. Aunque la realidad es dura, tu recuerdo me reconforta. Feliz cumpleaños en el cielo.
Feliz cumpleaños, hermano del alma. Aunque no pueda verte ni escuchar tu voz, te siento cerca en cada latido de mi corazón y en cada sonrisa que me arrancan tus recuerdos.